¡Juliana Deguis tiene su cédula! Madre dominicana enfrenta abuso de poder y VENCE

El trayecto de Juliana Deguis hasta la obtención del documento de identidad y electoral  ha sido largo,  ha tenido que enfrentar el escrutinio publico, intensas discusiones sobre su pertenencia a una tierra que la vio nacer, crecer, tener hijos y luchar por superarse.  Esta monteplateña de 29 años es parte de una generación de jóvenes bateyeros que buscan reivindicar los aportes de sus padres migrantes y el disfrute pleno de sus derechos ciudadanos.

Hacemos un recuento de los hitos más importantes en el caso de esta joven madre que enfrentó el abuso de poder e hizo valer sus derechos, convirtiendose en símbolo de la lucha de miles de dominicanos a los que la sentencia 168-13 pretendía desnacionalizar.

Escrito por Dominican@s por Derecho │Imágenes y titular  de Acento.com.do

Juliana Cédula

Juliana Deguis mientras recibe su cédula de identidad y electoral

Santo Domingo, Rep. Dom. Desde el 2008 una joven madre disputaba en los tribunales su derecho a tener una vida digna.  A  la ciudadana  Jualiana Deguis  la Junta Central Electoral, como a miles de dominican@s, tenía retenida su acta de nacimiento, a pesar de haber sido emitida por una autoridad competente y estar correctamente asentada en el registro civil.

Un trayecto díficil para esta monteplateña de 29 años edad: Años con el pendiente de  continuar su formación escolar, conseguir un empleo y declarar a sus cuatro hijos.  A través de un recurso de amparo, Juliana exigía la «liberación»  de su documento. El caso originó la sentencia 168-13, que arrebataba la nacionalidad a cuatro generaciones de dominicanos hijos de padres extranjeros en situación migratoria irregular.  Sin esperarlo, Juliana se convirtió en símbolo de la lucha de una nueva categoría de ciudadanos dominicanos, surgida a partir de la sentencia del TC: Los desnacionalizad@s.

El  23 de mayo, el poder Ejecutivo de República Dominicana  promulgó la ley 169-14,  definida por la plataforma de organizaciones Dominican@s por Derecho como “un paso de avance en la búsqueda de solución a los conflictos generados por la sentencia 168-13 y   la injusta situación viven miles de personas  a quienes  sistemáticamente instancias gubernamentales  han negado o limitado  el acceso  a  documentos de identidad que acreditan su nacionalidad».

 El nuevo texto legal establece  “un régimen especial en beneficio de hijos  extranjer@s no residentes, nacidos en el territorio nacional durante el período comprendido entre el 16 de junio de 1929 al 18 de abril de 2007, inscritos en los libros del Registro Civil dominicano y  el registro de hijos  extranjer@s en situación irregular nacidos en la República Dominicana y que no figuran inscritos en el Registro Civil.  Por tener acta de nacimento Juliana pertenece al primer grupo.

Aún con el amparo de la recién promulgada ley  y  su notoriedad pública,  fue infructuoso el esfuerzo inicial de Julianna por obtener su  acta de nacimiento y cédula, indispensables para una serie de trámites en República Dominicana como optar por un empleo, cambiar un cheque en una entidad bancaria o ejercer el derecho al voto.

“Su caso es especial”, «No tenemos una resolución o memoradum», «no me sube el acta de nacimiento a la computadora»,  le habían dicho  los oficiales que le entregaron el acta de nacimiento pero se negaron a realizar el tramite de cedulación el pasado 25 de junio.

Más adelante, en una nota de prensa, el propio presidente de la JCE ofrecía una respuesta más amplia aunque más confusa sobre el procedimiento que debía agotar la joven, y todos los hijos de extranjeros  en su situación,   para la obtención de su documento:    “La   Comisión de Oficialía de la Junta Central Electoral reciba formalmente la Ley de Naturalización, y conozca de los expedientes de la auditoría, y haga sus recomendaciones al Pleno sobre el particular, a los cuales se les irá dando salida conforme se vayan trabajando”.

El 23 de Julio, acompañada de sus abogados, María Martinez y Génaro Rincón,  Juliana  llegó a la oficialía de la  Junta Central Electoral de  Yamasá, a donde fue remitida desde la  sede central para hacer solicitud de su cédula de identidad y electoral.

Como se exige a todos los ciudadanos, la joven entregó  en el centro de cedulación de Yamasá su acta de nacimiento para estos fines.  A seguidas llegó  la  captura fotográfica.  Todo parecía indicar que tras el tramite se iría a casa con  la identificación, sin embargo, a Deguis le dieron un plazo de 30 días para la entrega del documento.   Otra vez a esperar.

Una semana más tarde, los medios de comunicación daban cuenta de una buena noticia: Se informaba que Juliana Deguis podía pasar a retirar su plástico por cualquier centro de cedulación.  La primera afectada por al setencia 168-13 escogió ir a la Junta del Distrito Nacional.  En un procedimiento rápido, sencillo,  con la amabilidad de todo el personal y  la curiosidad de los presentes, Juliana fue recibida por un contingente de periodistas asentados en el lugar.  Tomaron las historicas imágenes de una joven madre dominicana, que enfrentó el abuso de poder y venció, tal como informaba de inmediato el periodico digital Acento.com.do.

Este 1ro. de agosto es  día inspirador JUJUpara todos los dominican@s que luchan por el reconocimiento y respeto de su derecho a la nacionalidad. Julianna Deguis ya tiene su cédula de identidad y electoral que la acredita como lo que siempre ha sido ¡DOMINICANA!

Felicidades al equipo legal de @Mosctha por el excelente acompañamiento.

Juliana tiene su cédula ¿Y los demás? 

De acuerdo a datos ofrecidos por al JCE, más de 25 mil descendientes de extranjeros están situación similar a la de Juliana.   A pesar de que la 169-14, en lo referente al grupo previamente inscritos en el registro civil  es una ley autoaplicativa, que no necesita de un reglamento, organizaciones que trabajan con afectados como el Movimiento Reconoci.do denuncia que la JCE desacata el mandato legal.

Todo parece indicar que el verdadero reto de este proceso es  la puesta en práctica de la ley y no el consenso, que incluyó un agitado debate público y un proceso de consultas, encabezado por el propio presidente de la República, Danilo Medina, hasta la promulgación del texto.

Quedan planteados serios desafíos  para enfrentar las diversas formas de  exclusión y el peligro de la apatridia que todavía amenaza la vida de los afectados/as, así como   garantizar la plena restitución de los derechos de los grupos más vulnerados de nuestro país.