Comunicado a propósito del discurso del presidente Danilo Medina en la CELAC
Desde la plataforma de organizaciones Dominicanos por Derecho y el Comité de Solidaridad con Personas Desnacionalizadas manifestamos nuestro profundo desacuerdo con el discurso emitido por el presidente Danilo Medina en la reciente cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (CELAC) efectuada en La Habana, Cuba.
El presidente Medina realizó una serie de afirmaciones que no se corresponden con la situación que actualmente viven miles de dominicanos/as afectados/as por la Sentencia 168-13. Medina afirmó que es falso que en la República Dominicana se quite la nacionalidad: “No se les puede quitar lo que no tenían”, dijo el presidente.
Resulta preocupante que desde la primera magistratura se cuestione el Estado democrático y derecho previsto en la Constitución. Es doloroso comprobar lo humillante de este discurso para la dignidad de las personas afectadas, a quienes no solo discriminan en la práctica por su color de piel o el origen de sus padres, sino también desde la Presidencia de la República, con una declaración que niega los derechos adquiridos a dominicanos/as. Esto demuestra la inseguridad jurídica en la que vivimos los/as ciudadanos/as dominicanos/as.
El primer mandatario también aseguró que mucha gente puede tener “la confusión” de que la Sentencia emitida por el Tribunal Constitucional es retroactiva, aludiendo a la falacia de que “todas las constituciones desde 1929 hasta la fecha establecen las mismas condiciones para obtener la ciudadanía”. Por eso es importante aclarar que, aunque el texto constitucional es el mismo, el contenido atribuido por el Tribunal Constitucional a los criterios de nacionalidad es nuevo, y hoy quiere ser aplicado hacia el pasado a personas que nacieron décadas antes de la sentencia 168-13, violando así los derechos de esta población.
En este tema, el presidente parece estar mal asesorado. Es bien sabido que hasta la Constitución del 2010 la nacionalidad se adquiría por ius soli, componente esencial para el derecho que las personas afectadas adquirieron en su día y hoy les quieren arrebatar.
Finalmente, el presidente sugirió que la solución que propondrán al Congreso será una ley de “Naturalización” para “recoger” a las personas que se encuentran en un “limbo jurídico”. A esta propuesta reiteramos: la naturalización es un procedimiento para extranjeros. Solo aceptaremos una solución que reconozca el derecho pleno de las personas afectadas a su nacionalidad dominicana.
Lamentamos que el primer mandatario haya desarrollado su discurso atendiendo a los argumentos esgrimidos por los sectores más conservadores del espectro político dominicano. Una cosa es regularizar la situación de personas extranjeras que migraron desde otro país, y otra muy distinta es querer cambiar el estatus de nacionalidad de personas que nacieron en el país y que fueron considerados como dominicanos durante toda su vida.
Por último, le sugerimos al presidente Medina que desista en su intento de confundir al país con el Estado que comanda. La gran mayoría de los/as dominicanos/as no son racistas ni discriminadores, pero el Estado dominicano sí viola derechos humanos en algunas de sus políticas y prácticas, tales como la Sentencia 168-13, y ahora también las sentencias 275-13 y 290-13, emitidas por el mismo Tribunal Constitucional.
Dominicanos por Derecho es una plataforma de organizaciones que promueven y defienden el reconocimiento de la nacionalidad de las personas afectadas por las políticas de desnacionalización implementadas por el Estado dominicano.
El Comité de Solidaridad con Personas Desnacionalizadas agrupa a doscientos setenta intelectuales, comunicadores, artistas, políticos y religiosos del país.